Puntos para meditar en Hechos 16-21

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1. ¿Cuáles destacarías como los dos versículos más importantes en la lectura de esta semana para ti personalmente?

2. ¿Cuál es el incidente más gracioso que has encontrado en estos capítulos?

3. ¿Por qué los espíritus malignos impulsarían a una mujer poseída a testificar que Pablo y sus compañeros eran “siervos del Dios altísimo, quienes os anuncian el camino de salvación”? (16:17) ¿Y por qué Pablo no estaría agradecido por cualquier apoyo que pudiera recibir?

4. 16:31: ¿Por qué los Santos de los Últimos Días insisten en que uno debe ganarse la salvación a través de las buenas obras, cuando Pablo enseñó claramente que todo lo que era necesario para que el carcelero y su familia se salvaran era que “creyeran en el Señor Jesucristo”?

5. ¿Por qué Agabo y otros discípulos fueron inspirados para advertir a Pablo que no fuera a Jerusalén, si él mismo había sido inspirado para ir? (20:22-24; 21:4, 11-12.)

6. ¿Cuántas revelaciones, milagros u otros dones espirituales experimentados por la iglesia primitiva puedes encontrar registrados en Hechos 16-21?

7. ¿Puedes encontrar pasajes que ilustren hasta 12 principios de la buena obra misional e identificar cada principio?

8. ¿Puedes encontrar pasajes en Hechos 16-21 para apoyar cada una de las siguientes enseñanzas doctrinales distintivas de los Santos de los Últimos Días?

El hombre tuvo una existencia premortal.
Naciste en esta tierra en un tiempo y lugar previamente ordenado por Dios.
Dios tiene un cuerpo de carne y huesos, y somos literalmente Su descendencia.
Las personas no deben ser condenadas por no vivir las leyes del evangelio que no conocían.
Conferir el Espíritu Santo a través de la imposición de manos es esencial.
Los discípulos se reunieron el primer día de la semana (domingo) para adorar y participar de la Santa Cena, apoyando la idea de que el domingo era el nuevo sábado cristiano.
La autoridad es necesaria en el ministerio.
Se predice una gran apostasía.

Posibles respuestas para los Puntos para meditar en Hechos 16-21

1. ¿Cuáles destacarías como los dos versículos más importantes en la lectura de esta semana para ti personalmente?

Tu elección. Para mí serían:

17:28-29: el mensaje de Pablo en Atenas de que somos literalmente descendencia (no simplemente la creación) de Dios, lo que nos dice mucho sobre la naturaleza de Dios y la naturaleza del hombre y nuestra existencia preterrenal con nuestros padres celestiales.
20:35: Mayor felicidad hay en dar que en recibir. Este es el corazón mismo del cristianismo verdadero, pero una parte que algunos discípulos profesos nunca aprenden realmente.

2. ¿Cuál es el incidente más gracioso que has encontrado en estos capítulos?

Tu elección. Pero para mí, tiene que ser el extenso discurso de Pablo en Troas, que duró hasta la medianoche y resultó en que el pobre Eutico se durmiera y cayera del tercer desván, aparentemente hasta su muerte. Pero después de interrumpir su charla el tiempo suficiente para curar a Eutico, el prolijo Pablo no se dio cuenta de que su discurso se estaba volviendo tedioso, ¡sino que continuó hablando a los reunidos hasta la mañana! (20:9-11). Por divertido que parezca, por supuesto, debemos suponer que tanto Pablo como sus oyentes bien pueden haber reconocido que la partida inminente de Pablo por última vez justificaba que se tomara el tiempo que tomó.

En segundo lugar estarían los siete hijos de Esceva, que intentaron sin autoridad expulsar un espíritu maligno, solo para ser atacados por el hombre con el espíritu maligno, quien dijo: “A Jesús conozco y sé quién es Pablo; pero vosotros, ¿quiénes sois?” y que luego “saltando sobre ellos y dominándolos, pudo más que ellos, de tal manera que huyeron de aquella casa desnudos y heridos”. (19:15-16)

El élder Bruce R. McConkie dio la siguiente explicación: “El testimonio de la doncella guiada por el diablo era verdadero. Pablo y Silas fueron profetas; tenían las palabras y el poder de la salvación. Pero el verdadero testimonio de los siervos de Satanás no conduce a la salvación. En efecto la doncella estaba diciendo: ‘Adelante, cree en Pablo y Silas y en este Jesús que ellos predican. Estoy de acuerdo en que ellos y su Maestro son de Dios; y como ahora estamos unidos en ese punto, tú también puedes continuar siguiéndome y gozar de los frutos de mi adivinación.’ Y cuántos otros practicantes de religiones falsas hay que hablan de Jesús y sus doctrinas de labios para afuera para que la gente los siga más fácilmente a ellos y a su marca especial de gracia ‘salvadora’. Fue por la misma razón aquí involucrada que Jesús mismo prohibió a los demonios que él había echado fuera testificar que él era el Hijo de Dios (Lucas 4:41)” (Doctrinal New Testament Commentary, 3 vols. [1965–73], 2:149).

A pesar de este concepto erróneo común, los Santos de los Últimos Días no enseñan que uno debe “ganarse” su salvación a través de buenas obras. Pero aunque no “ganamos” la salvación, tenemos que “calificar” para ella a través de una fe activa que resulta en buenas obras, como enseña claramente Santiago 2:14-17. El Libro de Mormón, en Helamán 14:8, dice esencialmente lo mismo que dijo Pablo: “El que creyere en el Hijo de Dios, tendrá vida sempiterna”. Pero para que nadie piense que este es un camino demasiado simple, cinco versículos más adelante agrega: “Y si creéis en su nombre, os arrepentiréis de todos vuestros pecados, para que de ese modo logréis una remisión de ellos por medio de los méritos de él”. En otras palabras, no somos salvos por nuestras buenas obras, pero tampoco somos salvos sin un deseo y esfuerzo de nuestra parte para hacer tales obras, como lo instruyó Jesús. No podemos decir verdaderamente que creemos en Él si no estamos dispuestos a hacer lo que Él pidió.

5. ¿Por qué Agabo y otros discípulos fueron inspirados para advertir a Pablo que no fuera a Jerusalén, si él mismo había sido inspirado para ir? (20:22-24; 21:4, 11-12.)

Agabo y los otros discípulos tenían razón al decirle a Pablo, por inspiración, que la esclavitud y otros peligros lo enfrentaban si iba a Jerusalén. Con esa percepción espiritual y su amor por Pablo, naturalmente querrían advertirle que no fuera. Pero ninguno de ellos tenía una autoridad superior a la de Pablo, y Pablo tuvo que seguir la dirección que recibió personalmente del Espíritu para ir a Jerusalén a pesar de las pruebas y el eventual martirio que le esperaba.

6. ¿Cuántas revelaciones, milagros u otros dones espirituales experimentados por la iglesia primitiva puedes encontrar registrados en Hechos 16-21?

Hay por lo menos trece:

16:6: El Espíritu Santo prohíbe a Pablo predicar en Asia.
16:7: El Espíritu no les permitió ir a Bitinia.
16:9: Visión del hombre de Macedonia
16:14: El Señor abrió el corazón de Lidia.
16:16-18: Pablo echa fuera un espíritu maligno de una mujer.
16:26: Un gran terremoto sacude los cimientos de la cárcel, abre las puertas y suelta las ligaduras de los presos. Los escépticos podrían decir que fue solo una coincidencia que ocurrió el terremoto, ¡pero los terremotos normales ciertamente no rompen las ataduras de los prisioneros!
18:5: Pablo fue “impulsado por el Espíritu”.
18:9: El Señor habla en una visión.
19:11-12: Milagros extraordinarios, incluyendo sanidades y expulsión de malos espíritus a través de los pañuelos de Pablo
20:22-23: Pablo fue “ligado por el Espíritu” para que fuera a Jerusalén, sabiendo por el Espíritu Santo que le esperaban prisiones y aflicciones.
21:4: Los discípulos advierten a Pablo “por el Espíritu” que no vaya a Jerusalén.
21:9: Las cuatro hijas de Felipe profetizan.
21:11: Agabo por medio del Espíritu Santo le dice a Pablo de su futuro encarcelamiento.

7. ¿Puedes encontrar pasajes que ilustren hasta 12 principios de la buena obra misional e identificar cada principio?

Los misioneros deben evitar ofender innecesariamente. (16:3; 21:26)
Los misioneros deben seguir la dirección del Espíritu en cuanto a dónde ir ya quién contactar. (16:6-9)
Los misioneros pueden y deben ser ejemplos de alegría incluso en tiempos de dificultad (16:25)
Es importante encontrar maneras de entablar amistad y servir a aquellos a quienes queremos enseñar. (16:27-33)
Los misioneros deben utilizar las Escrituras en la enseñanza. (17:2, 11; 18:18)
Los misioneros deben ser creativos para encontrar personas a las que enseñar, como enseñó Pablo en la sinagoga, en el mercado, en público, y fue de “casa en casa”. (17:17; 20:20)
Dar testimonio es una parte importante de la enseñanza del Evangelio. (17:23; 18:5)
Es bueno comenzar reconociendo cosas que los misioneros y aquellos a quienes enseñan ya tienen en común. (17:23)
El valor es una característica importante de los buenos misioneros. (20:24)
Los misioneros deben mantenerse económicamente (18:3; 20:33-34)
El razonamiento es una actividad útil en la obra misional. (18:4, 19)
Los misioneros deben preocuparse por la nutrición espiritual continua de los nuevos conversos. (20:28)

8. ¿Puedes encontrar pasajes en Hechos 16-21 para apoyar cada una de las siguientes enseñanzas doctrinales distintivas de los Santos de los Últimos Días?

El hombre tuvo una existencia premortal. (17:28-29)
Naciste en esta tierra en un tiempo y lugar previamente ordenado por Dios. (17:26)
Dios tiene un cuerpo de carne y huesos, y somos literalmente Su descendencia. (17:29)
Las personas no deben ser condenadas por no vivir las leyes del evangelio que no conocían. (17:30)
Conferir el Espíritu Santo a través de la imposición de manos es esencial. (18:25-28; 19:1-6)
Los discípulos se reunieron el primer día de la semana (domingo) para adorar y participar de la Santa Cena, apoyando la idea de que el domingo era el nuevo sábado cristiano. (20:7)
La autoridad es necesaria en el ministerio. Aunque Apolos era un creyente ferviente, evidentemente no había sido debidamente preparado ni autorizado como misionero, o habría sabido acerca de la necesidad del Espíritu Santo después del bautismo. Por lo tanto, Pablo rebautizó a los conversos de Apolo y les impuso las manos en la cabeza para recibir el Espíritu Santo. (18:25-28; 19:1-6.) La necesidad de la autoridad divina también se muestra en la historia de los siete hijos de Sceva que intentaron expulsar un espíritu maligno sin estar debidamente autorizados. (19:14-16.)
Se predice una gran apostasía. (20:29-30)