Puntos para meditar en Juan 1

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Puntos para meditar en Juan 1

1. ¿Qué cosas importantes aprendemos acerca de la vida premortal de Jesucristo en el registro de Juan?

2. Aunque el término “Luz de Cristo” no aparece en su Evangelio, ¿qué nos enseña Juan de importancia acerca de esa “luz”?

3. ¿No somos ya todos hijos e hijas de Dios? ¿Qué significa, entonces, que Cristo dio “a los que creen en su nombre … potestad de llegar a ser hijos de Dios”? (Juan 1:12)

4. ¿Cómo podemos responder a alguien que argumente que José Smith no pudo haber tenido la visión que afirmó haber tenido, ya que “A Dios nadie le vio jamás”? (Juan 1:18.)

5. ¿Cuáles consideras que son las otras contribuciones más importantes de la Traducción de José Smith para nuestra comprensión de Juan 1?

6. ¿Por qué Juan llama a Jesús “el Cordero de Dios”? ¿En qué es mejor un cordero que una vaca, un caballo o un pollo?

7. ¿Qué uso actual ha hecho la Iglesia de la invitación de Jesús, “Venid y ved”? (Juan 1:39)

8. ¿Por qué Jesús le dio a Simón el nuevo nombre de Cefas, que significa piedra? ¿Eso es un cumplido?

9. ¿Por qué podemos suponer que Jesús le dijo a Natanael: “He aquí un verdadero israelita, en quien no hay engaño”? (Juan 1:47)

Posibles respuestas para los Puntos para meditar en Juan 1

1. ¿Qué cosas importantes aprendemos acerca de la vida premortal de Jesucristo en el registro de Juan?

  • Él estaba en el principio con Dios. (1:1-2)
  • Él fue el Creador de “todas las cosas”. (1:3)
  • Él mismo tenía el “rango” de Dios. (1:1)
  • Fue Él quien iluminó a los hombres (les proporcionó una conciencia) y les dio poder para “llegar a ser hijos de Dios” incluso antes de Su nacimiento. (1:4, 9, 12)

2. Aunque el término “Luz de Cristo” no aparece en su Evangelio, ¿qué nos enseña Juan de importancia acerca de esa “luz”?

Es universal, dando luz a “todo hombre que viene a este mundo”. (1:9) Juan no profundiza en el tema, pero a través de otras escrituras aprendemos, como se resume en la Guía para el Estudio de las Escrituras:

Energía, poder o influencia divinos que proceden de Dios por medio de Cristo y que dan vida y luz a todas las cosas. Es la ley por la cual se gobiernan todas las cosas tanto en el cielo como en la tierra (DyC 88:6–13). También ayuda a las personas a comprender las verdades del Evangelio y sirve para colocarlas sobre el sendero del Evangelio que conduce a la salvación (Juan 3:19–2112:46Alma 26:1532:35DyC 93:28–29, 31–32, 40, 42).

La luz de Cristo no se debe confundir con la persona del Espíritu Santo, pues la luz de Cristo no es un personaje, sino una influencia que procede de Dios y prepara a la persona para recibir el Espíritu Santo. Es una influencia para bien en la vida de todo ser humano (Juan 1:9DyC 84:46–47).

Una manifestación de la luz de Cristo es la conciencia del hombre, la cual le ayuda a distinguir entre el bien y el mal (Moro. 7:16). Cuanto más aprende una persona acerca del Evangelio, tanto más sensible se vuelve su conciencia (Moro. 7:12–19). A los que siguen la luz de Cristo, se les guía hacia el evangelio de Jesucristo (DyC 84:46–48).

3. ¿No somos ya todos hijos e hijas de Dios? ¿Qué significa, entonces, que Cristo dio “a los que creen en su nombre … potestad de llegar a ser hijos de Dios”? (Juan 1:12)

En cierto sentido, sí, todos somos hijos espirituales de Dios, habiendo “nacido” como espíritus en la vida preterrenal. Pero Jesús enseñó que todos necesitamos “nacer de nuevo”, en un sentido simbólico y adoptivo, convirtiéndonos en Sus hijos e hijas, tomando sobre nosotros Su nombre y siendo vivificados por Su Espíritu. Solo aquellos que hayan renacido de esta manera tendrían derecho a convertirse en Sus herederos en la eternidad.

4. ¿Cómo podemos responder a alguien que argumente que José Smith no pudo haber tenido la visión que afirmó haber tenido, ya que “A Dios nadie le vio jamás”? (Juan 1:18.)

Obviamente, algo está mal con el pasaje tal como está, ya que la Biblia registra que muchos profetas antiguos vieron a Dios, incluidos Moisés, Aarón, setenta de los ancianos de Israel, Salomón, Isaías, Abraham, Amós y, evidentemente, Ezequiel y Enoc. . ¿Por qué alguien preferiría dar más peso a un pasaje que parece decir que nadie ha visto nunca a Dios que a múltiples pasajes que testifican lo contrario? Bajo inspiración, José Smith corrigió este pasaje para que dijera: “Y a Dios nadie le vio jamás, excepto el que ha dado testimonio del Hijo, pues si no es por medio de él, nadie puede ser salvo.”

5. ¿Cuáles consideras que son las otras contribuciones más importantes de la Traducción de José Smith para nuestra comprensión de Juan 1?

Tu elección. Hay muchos cambios estéticos y explicativos a Juan 1 en la TJS, pero la mayoría de ellos hacen poco para aclarar o ampliar la doctrina básica. Sin embargo, hay varios pasajes relacionados con Juan el Bautista y “Elías” que, dependiendo del punto de vista de uno, aclaran u oscurecen aún más la cuestión de quién o qué significa el término “Elías”. El lector querrá leer la lista completa de cambios en el Apéndice de traducción de José Smith que acompaña a las Ayudas para el Estudio en la Biblioteca del Evangelio. Los puntos a tener en cuenta parecen incluir:

  • Contrariamente a lo que parece de la versión Reina Valera, Juan el Bautista no negó que él fuera, en un sentido simbólico, “Elías”. Él vino a preparar el camino antes de la primera venida de Jesús de la misma manera que un “Elías” de los últimos días vendría a preparar el camino para su segunda venida.
  • Juan sí negó ser el Elías que iba a restaurar todas las cosas o el Cristo, que también llevaría el título de Elías.
  • Podríamos notar que en Mateo 17:11-13, después de que los apóstoles vieron a Moisés y Elías transfigurados, le preguntaron a Jesús sobre la futura venida profetizada de ese profeta. Jesús respondió: “A la verdad, Elías vendrá primero y restaurará todas las cosas. Mas os digo que Elías ya vino, y no le reconocieron, sino que hicieron con él todo lo que quisieron…. Los discípulos entonces entendieron que les había hablado de Juan el Bautista.” En años anteriores algunos misioneros bien intencionados usaron Mateo 17:11-13 para tratar de probar a los investigadores que la venida de Juan el Bautista a José Smith en los últimos días estaba profetizada en las Escrituras. Pero Juan no hizo ni pudo “restaurar todas las cosas”, ya que solo poseía el Sacerdocio Aarónico. Jesús no quiso decir que Juan el Bautista restauraría la autoridad que ni siquiera poseía, sino que Juan actuó como un precursor de la misión terrenal del Salvador, tal como lo haría otro “Elías” en los últimos días.
  • Vale la pena señalar que en D. y C. 27:6-7, tenemos más discusión sobre el Elías que tendría las “llaves de llevar a cabo la restauración de todas las cosas concernientes a los últimos días que se han declarado por boca de todos los santos profetas desde el principio el mundo.” Aprendemos que ese Elías era el mismo personaje que visitó a Zacarías y le prometió que tendría un hijo. Pero ese Elías es conocido en el Nuevo Testamento como Gabriel, de quien José Smith dijo que era igual a Noé. José Smith también enseñó que Noé estaba al lado de Adán en la autoridad del sacerdocio. Bien podría ser Noé, a quien se hace referencia como “Elías” en D. y C. 110, quien visitó a José Smith y Oliver Cowdery y les confirió “la dispensación del evangelio de Abraham”. Según la cronología del Antiguo Testamento, parece que Noé ciertamente habría sido la principal autoridad del sacerdocio en la tierra en la época de Abraham y, por lo tanto, sería un emisario apropiado para enviar a restaurar las llaves sagradas en los últimos días.
  • Finalmente, el término “Elías” claramente puede tener múltiples significados, especialmente en el lenguaje de los Santos de los Últimos Días. Puede significar Elías, el Profeta, del Antiguo Testamento de quién Malaquías habló. Simbólicamente puede significar Juan el Bautista, Cristo, y Gabriel o Noé. Puede que haya habido o no alguien de importancia, aparte de “Elías el Profeta”, que en realidad llevara ese nombre, aunque muchos han llevado el título que deriva de ese nombre. Así como Malaquías predijo la venida de Elías en los últimos días para preparar el camino para el regreso del Señor, también se ha dicho que otros que han tenido una misión preparatoria están actuando en el “espíritu de Elías”. Bien puede ser que si José Smith todavía estuviera presente, podría aclarar más lo que enseñó sobre el tema.

6. ¿Por qué Juan llama a Jesús “el Cordero de Dios”? ¿En qué es mejor un cordero que una vaca, un caballo o un pollo?

Presumiblemente porque un cordero es el epítome mismo de la mansedumbre. Y porque Isaías había predicho que el Mesías sería “llevado como cordero al matadero”. (Isa. 53:7.)  Aunque era el Creador del cielo y la tierra, Jesús se sometió obediente y alegremente a la voluntad de Su Padre, sufrió una agonía insondable por los pecados y las imperfecciones de todos nosotros, y aceptó una muerte atroz.

7. ¿Qué uso actual ha hecho la Iglesia de la invitación de Jesús, “Venid y ved”? (Juan 1:39)

Véase el video en https://www.youtube.com/watch?v=URoTVs6K7AA

8. ¿Por qué Jesús le dio a Simón el nuevo nombre de Cefas, que significa piedra? ¿Eso es un cumplido?

Seguramente Jesús tenía la intención de que fuera un cumplido y que aumentara la comprensión de Simón de lo que fue llamado a ser. La mayoría ha asumido que Jesús se refirió a la fuerza de una piedra grande, sobre la cual se podría erigir un edificio. Pero la TJS da una perspectiva más amplia: “Serás llamado Cefas, que quiere decir, vidente o sea piedra”. En otras palabras, Pedro iba a ser no tanto el tipo de piedra de construcción como el tipo de “piedra vidente” que José Smith usó para traducir el Libro de Mormón. Se convertiría en el principal profeta, vidente y revelador después de la partida de Cristo.

9. ¿Por qué podemos suponer que Jesús le dijo a Natanael: “He aquí un verdadero israelita, en quien no hay engaño”? (Juan 1:47)

Una posibilidad es que así como Jesús sabía que Natanael había estado sentado debajo de una higuera, también sabía por revelación que Natanael le había preguntado a Felipe: “¿Puede salir algo bueno de Nazaret”? En esencia, Jesús podría estar diciendo: “Natanael, no estás lleno de pretensiones como la mayoría de la gente. Dices lo que piensas, sin preocuparte por lo que los demás piensen de lo que dices. ¡Eso es refrescante!”

Sin embargo, lo más probable es que la respuesta completa sea más profunda que eso. Las higueras eran lugares comunes de oración y meditación. Jesús bien pudo haber visto dentro del alma de Natanael y reconoció que él era verdaderamente puro de corazón, sin ninguna apariencia de engaño o fraude, por lo cual era digno de ser llamado como apóstol.